Ahora os presentaré a los personajes de esta novela corta. Empezaré con los que aparecen en el primer capítulo y luego la entrada irá creciendo, aunque de los siguientes no podré decir mucho.

 

Aurelia

Por supuesto, empiezo con ella, la protagonista y punto de vista de casi toda la narración. Es una maestra de escultura con buena fama, tras años de experiencia y reconocimientos. A pesar de su origen humilde ha llegado a poder permitirse una modesta y bonita Academia-hogar en plena capital, lo cual es todo un logro. Si algo malo tiene todo el lujo y esplendor de las grandes ciudades de Gralea es que son bastante prohibitivas para quien no sea de la nobleza o aclamado artista.

Aurelia quiso ser maestra de academia desde que puede recordar, aunque viviese en un pueblecito de montaña donde apenas había tradición artística, a diferencia de en el resto de la nación. Siempre ha sido buena y obediente, aunque no siempre ha estado del todo en la legalidad. Durante su juventud tuvo una novia que era muy cabeza loca y la animaba a saltarse clases por motivos no demasiado correctos. Eso sí, sin perjudicar a nadie. Y luego con su hijo también infrigió algunas leyes, pero por el bien del conocimiento, claro.

Serge

 

Fue un niño prodigio de la pintura y alcanzó la fama suficiente como para instalarse cerca de Aurelia en cuanto se independizó. Se quedó huérfano y ella le adoptó y se ocupó de que llegase tan lejos como prometía. Él, a cambio, la convenció y ayudó para conserguir nada menos que Arte más celósamente guardado de Gralea: el de crear gólems animados.

En muchas cosas se parece a Aurelia, como en su alta estatura o su pasión por crear, pero también tiene cosas como Nedea, como su peligroso interes por ampliar sus conocimientos con lo oculto. Y es que Serge ha seguido indagando donde no debería más allá de la fórmula que robó para su madre…

En el carácter, Aurelia y Serge se parecen mucho. Son simpáticos y amables, algo cabezones y harían lo que fuera por sus hijos o por su familia en general. Aunque Serge también sería capaz de mucho por gente con la que no comparta lazos. Es más generoso, quizá porque Aurelia ha vivido casi toda su vida bastante desapegada de los demás.

 

Daliana

Es la otra hija de Aurelia (aunque tampoco la parió (no, no puede)). Es alumna en su academia y de las más brillantes, porque es muy perfeccionista y busca el reconocimiento de su madre, a quien admira más que a nadie. Tiene un carácter difícil a veces, porque lleva lo de ser cabezona al extremo, y no se le da bien debatir o mantener conversaciones con quien no piensa como ella.

A pesar de enfadarse mucho, no es realmente mala, y le encanta ayudar a los demás, aunque eso la meta en líos, precisamente por la intensidad con la que hace todo. La trama comienza con ella y su ausencia. Al ser la más pequeña, Aurelia la mima y sobreprotege, y claro, no va a dudar en dejarlo todo para conseguir que vuelva.

 

Niere

Es el hijo de Serge, y también es alumno en la academia de Aurelia. No es muy espabilado, incluso es demasiado inocente para todo lo que se le viene encima.  Además tiende a despistarse mucho y centrarse en sus propios intereses, incluso dándo atención a cosas poco importantes en el peor momento posible. Le costará adaptarse a todo eso de ocultarse de los hechiceros y espías del estado.

Al menos tiene recursos, y su padre le ha enseñado algunos de sus truquitos secretos. También tiene muy buena mano con los animales, y consiguen enseñarles y hacer que le hagan caso en seguida. Se lleva genial con Daliana, al ser de edades parecidas, y se ven más como hermanos que como tía y sobrino. Él es quien controla que no se pase de agresiva con los demás.

 

Nedea

 

Puede parecer que no, pero es un personaje muy importante. Aunque no salga, está presente en la mente y las conversaciones del resto de personajes, ya que casi todo ocurre como reacción a lo que ella hizo en el pasado.

 

Guardianes

Son el cuerpo militar de Gralea y, en teoría, los únicos autorizados para activar y utilizar cristales de petricor. No constituyen un grupo muy numeroso, dado su poder y la paz de la que goza la nación tras la Liberación, pero están bien entrenados en el arco, la lanza y las técnicas mentales para controlar sus gólems. Se encuentran sobre todo montando guardia en los principales edificios del gobierno, en las murallas de las grandes ciudades y en la Muralla fronteriza.

Los iniciados controlan figuras de menor tamaño y se encargan de ayudar a los ciudadanos en emergencias, accidentes y demás. A veces incluso son contratados para cargar sillares en las obras públicas.